Parece increíble que estemos viviendo una situación de pandemia en tiempos de tantos progresos tecnológicos y científicos.
La misma humildad que siento cuando veo el firmamento en noches estrelladas, es la que siento cuando en mi mente, visualizo nuestro planeta lleno de vida y temor. La vulnerabilidad que sentimos, nos hace más humildes y con mayor capacidad para amarnos y respetarnos.
Nuestra conciencia más despierta, nos alerta del peligro de perdernos y sentimos la necesidad de vivir más en el presente compartiendo actos y demostraciones de AMOR.
Mi deseo es que estos tiempos oscuros pronto terminen y que nunca se olvide este despertar de conciencia planetaria.
Algo está cambiando y algo debe cambiar en los seres humanos y concienciarnos de lo que somos, y del potencial que todos llevamos dentro para modificar nuestras condiciones de vida. El planeta lo necesita, y nosotros aún más.
ResponderEliminarMantengo la esperanza en que después de esta pandemia, encontremos la luz necesaria para llevar a cabo una vida en armonía con la Naturaleza.
Gracias Belén por tu reflexión. Me gusta tu blog y te sigo.
Recibe un fuerte abrazo.
Gracias Antonia por tu comentario. Así es, que el ser humano se vuelva más agradecido y humilde con la naturaleza!!
ResponderEliminarAbrazos de luz.